Carlos NavarreteChilpancingo, Gro., (Octubre 4, 2017).- La fracción parlamentaria del PRD en el Congreso de Guerrero, salió en defensa del alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre, y aseguró que la información que proporcionaron diputados del PRI y Movimiento Ciudadano respecto a la auditoría que se aplicó a CAPAMA fue un acto de protagonismo, “con sesgo político” y “guerra sucia”, pues el proceso de fiscalización aún no concluye.Por ello, demandaron al coordinador de los diputados de Movimiento Ciudadano, Ricardo Mejía Berdeja, que defina si está con el Frente Ciudadano por México (FCM) o aclare si es un “infiltrado del PRI”, esto ante las constantes críticas que el legislador ha hecho a la administración de Acapulco.Al concluir la sesión ordinaria del Congreso local, diputados perredistas ofrecieron una conferencia de prensa en la sala José Francisco Ruiz Massieu, en la que fijaron postura respecto a las observaciones que hizo la Auditoría General del Estado (AGE) a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del municipio de Acapulco (CAPAMA), que presuntamente significan un daño patrimonial de más de 194 millones de pesos.El primero en hacer uso de la palabra fue el vicecoordinador parlamentario, Ociel Hugar García Trujillo, quien aclaró que el proceso de fiscalización que hizo la AGE a la CAPAMA no ha concluido y por tanto aún no se puede acusar a quienes están a cargo de la paramunicipal de haber incurrido en irregularidades durante el manejo de las finanzas, pues aún tienen la oportunidad se solventar las observaciones.Explicó que falta que la AGE notifique al director de la CAPAMA, Javier Chona, de las observaciones, para lo cual se le concederá a la autoridad 45 días naturales para justificar con documentos ese monto.“Este es un tema para sacar raja política, los comentarios que hicieron los diputados del PRI y Movimiento Ciudadano (Samuel Reséndiz y Ricardo Mejía) son erróneos, lo que hicieron fue difundir información para generar confusión, porque lo de la CAPAMA y la auditoría es un proceso no concluido”.Por su cuenta, el diputado Ernesto Fidel González Pérez recordó que la auditoría que se aplicó a la CAPAMA fue a petición del Congreso y no de los dos diputados que revelaron los resultados del informe de la AGE, por lo que criticó la postura “protagónica” de Samuel Reséndiz y Ricardo Mejía, ambos aspirantes a la presidencia municipal de Acapulco.Dijo que el actuar de Reséndiz Peñaloza es entendible porque es un adversario político, sin embargo cuestionó que Mejía Berdeja se sume a la “guerra sucia” en contra de un gobierno perredista, pese a que Movimiento Ciudadano es aliado del sol azteca en el FCM.“Yo le hago un llamado al diputado migrante, Ricardo Mejía, a que se defina, que diga si es parte del Frente o si es un infiltrado del PRI, que aclare y lo emplazo a que resuelva el diputado migrante que no es ni de aquí ni de allá”.La diputada Silvia Romero, quien es vocal de la Comisión de Evaluación y Seguimiento a la AGE, denunció que el presidente de la misma, Samuel Reséndiz, no convocó a los integrantes a una reunión de trabajo para analizar el informe que tiene de la AGE.Aseguró que la conferencia de prensa que ofreció el priista por la mañana, junto a Mejía Berdeja, quien también es vocal de la Comisión, fue unilateral, pues no consideraron al resto de los legisladores que la integran, e insistió en que no se puede hablar de irregularidades hasta que la AGE emita un dictamen final, lo cual podría ocurrir en noviembre.
