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Trabajadores de obra y albañiles desafían al COVID-19, “si no trabajamos qué comemos”

* Sabemos de las recomendaciones, pero no tenemos ningún tipo de seguro.

Chilpancingo, Gro., (Abril 23, 2020).- Albañiles y trabajadores de obra no tienen temor del COVID-19, ellos quieren chambear, van al día y deben llevar el sustento a sus familias.

Ellos, como otros trabajadores, saben que la pandemia del COVID-19 ha afectado la realidad de cada uno de los mexicanos, de los guerrerenses, principalmente de quienes viven día a día del trabajo que realizan.

Francisco Antonio, como el resto de trabajadores, es jefe de familia. Padre de cuatro hijos, lamenta tener que trabajar, “si no, no llevamos el alimento a nuestra familia, simplemente no comemos”, dijo ante la recomendación de quedarse en casa para prevenir el contagio del COVID-19.

Otro de ellos cuestiona la recomendación y pregunta “¿ese mes qué voy a comer?, ¿aire?”. La situación contrasta con la recomendación y la oportunidad de aquellos que pueden quedarse en casa y realizar una cuarentena durante la emergencia sanitaria.

Cada uno de ellos realiza su labor mientras se escucha el repiqueteó del cincel contra el muro que se encuentra en obra negra, y como en cualquier trabajo u oficio, algunos tienen que trasladarse desde sus hogares, en ocasiones desde muy lejos.

Uno de ellos se traslada de Petaquillas para realizar su jornada laboral. Interrumpe su actividad para comentar que es padre de cuatro niños pequeños, asegurando que toman las medidas necesarias para evitar el contagio a su familia, ante su forzoso traslado a la obra y riesgo de contraer COVID-19.

Don Rubén, por el contrario, asegura que el COVID-19 es pérdida de tiempo, y que sólo ha afectado su trabajo, pues él tiene ganas de seguir trabajando y llevando el sustento a su familia, que necesariamente dependen de su sueldo como albañil.

Pese a la situación, ellos continúan trabajando. Saben qué es el COVID-19, ya sea por los medios de comunicación o por las recomendaciones del gobierno, sin embargo, don Francisco asegura que no dejarán de llevar el sustento a su familia.

“A menos que nos llegara el contagio, entonces sí pues ni modo tenemos que parar y dar aviso a las autoridades para que estemos en tratamiento”.

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