Alejandro Gómez
Taxco, Gro., (Agosto 23, 2020).- Aún y con la reapertura de negocios en un 30 por ciento de su capacidad debido al Covid-19, para el sector restaurantero del destino turístico no existe una recuperación económica real porque no hay turismo, los comensales locales cuando mucho ocupan una mesa y la falta de liquidez dificulta la operatividad de los negocios, aseguró el presidente de la Asociación de Restauranteros “Unidos por Taxco” (Arupt), Omar Córdoba Cabrera.
“El problema no es el porcentaje de ocupación permitido; por ejemplo, un negocio tiene 12 mesas y el gobierno le autoriza poner a disposición 4 de ellas que corresponde al 30 por ciento, pero de ese número sólo una mesa se utiliza por la gente y eso equivale a cuando mucho un 25 por ciento de la parte proporcional autorizada”, afirmó el dirigente de los 28 afiliados al gremio restaurantero.
Córdoba Cabrera reconoció que todos sus agremiados tienen la mejor intención de abrir sus negocios pero existen complicaciones económicas para ello, mientras que las ventas son insuficientes para mantener los comercios, en virtud de que únicamente el 20 ó 30 por ciento de las mesas autorizadas son ocupadas por los comensales locales o de otras partes, en tanto que el servicio a domicilio no registra mayores ganancias al momento de hacer cuentas.
Puntualizó que la reapertura en estas condiciones no ayuda al comercio local y la recuperación económica no se aprecia, porque si bien el aparato gubernamental estatal busca fortalecer la promoción turística de los destinos con esa vocación para atraer visitantes, pero el gremio restaurantero debe esperar y aguantar aún más la crisis financiera, porque no tienen la capacidad monetaria para promover.
Mencionó que en épocas de crisis económica como la generada por el Covid-19, muchas personas que antes se dedicaban a otros oficios y profesiones ahora están vendiendo comida y postres a domicilio a través de las redes sociales para generar ingresos económicos y alimentar a sus familias, que si bien la actividad es válida y aceptable respecto a la diversificación de alimentos, pero se ha incrementado ese giro comercial.
Omar Córdoba Cabrera sostuvo que la difícil situación económica de los restauranteros no es culpa de las personas que optaron por la venta de comida en los recientes meses, en virtud de que la pandemia está cobrando factura a todos los sectores y a ello se suma la falta de turismo y el incremento en el precio de la plata, aunque confió en que el tema se irá normalizando y la gente regresará a sus anteriores negocios.
Apuntó que si bien no se han registrado más cierres de negocios por los efectos del Covid-19, pero la crisis económica está pegando fuerte al sector, donde algunos por fortuna son dueños de los locales y otros están aguantando la mala situación, “esperamos que la situación se mejore para que todos abramos y sigamos con las medidas sanitarias respectivas”.