Enrique Guevara AyvarLa famosa Zona Económica Especial anunciada desde hace más de un año como posible rampa de despegue para los estados de Guerrero y Michoacán, sigue siendo un enigma para muchas personas, especialmente ejidatarios que esperan que los grupos de inversionistas chinos, o de cualquier otra parte del mundo, les compren cientos o miles de hectáreas, especialmente en el municipio de La Unión, Guerrero, donde hay que decirlo es la municipalidad con más futuro económico por el gran interés que muestran y han mostrado desde siempre los inversionistas asiáticos para construir en ese lugar grandes empresas en distintos rubros.Qué necesitan los inversionistas para iniciar un mercado a gran escala, tierras y más tierras que afortunadamente tienen al por mayor los ejidatarios y particulares del municipio de La Unión, en ejidos colindantes con el estado de Michoacán, con los que ya platican representantes del gobierno estatal y de los propios inversionistas chinos, según lo afirma un conocido ejidatario de la zona para negociar la venta de sus propiedades, pero bajo condicionantes de los vendedores de no pactar con intermediarios ni politizar los negocios para no enturbiar el asunto, ya que asegura el ejidatario empiezan a salir al paso políticos que dicen no ser políticos pero que seguramente desean llevar agua a su molino mediante el tema de la ZEE.Tanto el gobierno de Michoacán y de Guerrero han mostrado desde sus inicios gran interés en la parte social, para impulsar el proyecto que lleva en sus planes la ampliación del aeropuerto de Zihuatanejo para recibir grandes aviones de carga, proyecto que a la fecha ya no es seguro porque ha surgido de última hora un proyecto aún vigente en el municipio de La Unión para construir un aeropuerto internacional, al que ya le hacen ojos los chinos por la gran cercanía que tendría con la zona de carga en Lázaro Cárdenas, la que también será ampliada de acuerdo a las necesidades del proyecto.Aseguran los ejidatarios de la zona que el gobernador Héctor Astudillo muestra gran interés por impulsar la ZEE del municipio de La Unión, apoyado en el jefe de la oficina del gobernador Alejandro Bravo Abarca y éste a su vez con Juan Antonio Reyes Pascasio, como coordinador de la ZEE y nativo de este municipio (La Unión), donde es considerado el mediador perfecto entre ejidatarios e inversionistas.Aunque se habla muy poco acerca del proyecto de la ZEE, los lugareños y especialmente ejidatarios poseedores de tierras están muy al pendiente del avance que muestran las negociaciones con los inversionistas chinos, como principales interesados en el proyecto en la zona y la posible apertura de un aeropuerto de carga en La Unión.Dicen los que saben que las malas noticias son borradas con buenas nuevas y piensan los que saben que es el momento de impulsar abiertamente el proyecto de la ZEE de La Unión, para hablar en el futuro de inversiones que saquen del ancestral rezago que muestra esa región de la Costa Grande, incluido el municipio de Coahuayutla, cuyos habitantes ganarían con la generación de empleos y puesta en marcha de proyectos productivos al sector campesino.Sin embargo, los gobiernos de Guerrero y Michoacán tendrán que tomar en cuenta que en el tema de los campesinos nada está escrito, porque seguramente encontrarán políticos que quieran convertir el asunto de las tierras en una copia de lo que ocurre en la Ciudad de México, pretendiendo de último momento cambiar precios por metro cuadrado y detener la inversión que cambiaría la vida social y económica de miles de personas de estos municipios.