La voz de Zihuatanejo

Opinion

SIN FIN DE HISTORIAS

EL PAGO DEL PREDIAL

Ramiro Arturo Barrera Moreno

¿Ya pagaste tu predial? Sin duda el cobro del impuesto predial es un gran problema en todas las ciudades del país. Se argumenta que la gran mayoría de las propiedades no pagan dicho impuesto y son pocos los contribuyentes que pagan año con año. En el municipio de Chilpancingo el actual presidente municipal Antonio Gaspar hizo cuentas alegres sobre lo que hipotéticamente podría ingresar por pago de ese impuesto y contrató a una empresa para que modificara las bases grabables de las construcciones, con el pretexto de que hacía años no se actualizaban; de tal manera que de golpe y porrazo a las personas que acuden en el mes de enero a pagar para aprovechar el descuento que se ofrece por pronto pago, se llevaron la sorpresa de que su pago se incrementó hasta en un 500 por ciento. Obviamente esto provocó que mucha gente se inconformara y reclamara el brutal incremento del pago de su predial.

Los contribuyentes no tardaron en organizarse y amenazaron con tomar medidas en contra del incremento desmedido de su predial y algunos se manifestaron indignados e invitaron a los afectados a unirse para dar marcha atrás a la impopular medida. Por tal motivo la administración municipal de Chilpancingo tuvo que doblar las manitas y tuvo que reconsiderar el alto cobro del impuesto predial. El costo político para Antonio Gaspar ya se nota desde ahora y seguramente que si continúa cometiendo arbitrariedades como la que relato su futuro no es nada halagüeño.
Aquí en Zihuatanejo, las autoridades municipales del catastro reconocieron que sólo el 30 por ciento de las construcciones pagan impuesto predial y el resto son morosos, a pesar de los estímulos que se han anunciado para incentivar el pago de dicha contribución y les quiten recargos y apliquen aquella máxima del “borrón y cuenta nueva”.

En esa lógica, me parece absurdo que a cientos de contribuyentes que año con año pagamos a tiempo, nos hayan bloqueado el pago ya que somos “sospechosos” de tener una residencia con alberca, amplísimos jardines estilo japonés, pisos de mármol de carrara y acabados de súper lujo, aunque nuestra “mansión” se ubique en colonias populares, con servicios públicos lamentables . Con aires de perdonavidas en el catastro argumentaron: “no puede usted pagar ya que un grupo de ingenieros expertos irá a su domicilio para hacer una revisión y determinar su nuevo valor catastral, regrese en ocho días y le tendremos respuesta”. En mi caso ya pasaron los 8 días y ningún experto se ha dignado a pisar el pasto japonés de mis jardines y seguiré esperando resignado.

Que disparatado que a quienes pagamos puntualmente nuestro impuesto predial se nos quiera premiar con esta medida, en lugar de ponerse a trabajar para abatir el brutal rezago en el pago de este impuesto. Y es de risa loca que en las zonas ejidales aledañas a Zihuatanejo, existan residencias de lujo y no paguen ningún impuesto porque la ley los ampara.

Esperaremos la reacción de los “beneficiados” por esta gran idea y estaremos pendientes de como con ideas más “brillantes” terminan de exprimir a los pocos contribuyentes que cumplimos.

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